TARTA CRUJIENTE

Con esta tarta quiero celebrar el haber llegado a 1000 seguidores en Instagram. Os quiero dar las gracias a todos por el apoyo y cariño que he recibido en este transcurso de tiempo y que mejor agradecimiento que celebrarlo con la receta de esta super tarta. En cuanto la hagáis por primera vez, vuestra familia y amigos os pedirán insistentemente que la volváis a hacer, es espectacular, tiene un sabor impresionante, no empalaga ni llena, simplemente perfecta.

Para empezar en una sartén ponemos una cucharadita de aceite de oliva y los cubitos de almendra, a fuego medio las freímos hasta que tomen un color dorado, reservamos. Cuidado con la tentación de comerlas al momento que queman una barbaridad.

Segundo paso es montar la nata, tiene que estar muy fría y prestar atención que tiene que tener un 35 % de grasa para que monte bien. Cuando la tengo casi montada, le incorporo el azúcar a gusto y continuo con la batidora hasta que queda bien montada. Yo le echo entre 2 y 3 cucharadas, no me gusta muy dulzón. Reservo en frío.

En una sartén grande, pongo el aceite de girasol abundante, y a fuego medio-alto (mi cocina tiene 9 niveles, las hago sobre el nivel 7), frío la hojas de pasta brick, tener mucho cuidado cuando les deis la vuelta que se rompen con mucha facilidad, y sobre todo cuando las saco de la sartén, ese es el peor momento, se vuelven muy quebradizas en cuanto las sacáis del aceite. Las paso a un papel absorbente y las espolvoreo con un colador el azúcar glass. Así con las tres hojas.

Toca montar la tarta. en la bandeja donde voy a presentar la tarta, coloco una hoja de pasta brick, pongo encima la crema pastelera y le pongo las almendras fritas. Vuelvo a poner otra hoja de pasta y le pongo la nata montada y otra vez las almendras. Por último le pongo la última hoja y le añado otra vez azúcar glas espolvoreada por encima y unas pocas almendras.

Como idea, la pasta brick, la podéis cortar en 4, haciendo unos rectángulos o cuadrados y los podéis servir individual, quedan chulísimos.

Por último, el problema que tiene esta tarta es que no se puede montar con tiempo, la tenéis que formar justo en el momento en que se va a comer, ya que la pasta absorbe la humedad y no queda con el crujiente en boca que tiene que tener. A su favor, se monta muy rápida, y el resultado merece la pena.