JUDÍAS PINTAS CON PANCETA, CHORIZO Y MORCILLA

Hola, esta semana un guiso de esos que apetecen con las bajas temperaturas que estamos teniendo. Muy sencillo de hacer, ingredientes que se encuentran con facilidad, cómodo en su elaboración y vamos a obtener un resultado espectacular. Te comes un buen plato, que no te falte el pan y un poquito de vino, sofá y mantita y ríete de las temperaturas bajo cero.

Vamos con la receta. Lo primero que tenemos que hacer, es la noche anterior poner las judías en agua. Veremos que van a doblar su tamaño. Y muy importante, nunca vamos a remover el guiso con una cuchara, pues corremos el riesgo que se rompan las judías. Siempre cojeremos la cazuela del asa y la moveremos delante, detrás, varias veces cada vez que pongamos un ingrediente nuevo.

En una cazuela, pongo las judías escurridas, la panceta, la punta de jamón, el laurel y las bolas de pimienta negra. Cubro con agua y lo llevo a ebullición. Pongo el fuego a medio gas y cocino durante 1 hora, en este tiempo voy a ir desespumando varias veces y quitando todas las impurezas que van a ir apareciendo a lo largo de la cocción.

Mientras se van cocinando, vamos a ir preparando todos los ingredientes que vamos a incorporar a continuación. Los tomates los voy a rallar. La cebolla la corto en trocitos muy pequeños, al igual que el pimiento, desechando las hebras blancas de su interior. Hago un majado con los ajos, sal y perejil.

Pasada la hora, le incorporo los tomates rallados y los chorizos, que previamente con un palillo los pincho varias veces. Sigo con la cocción.

En una sartén, añado 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra a calentar, incorporo la cebolla con un poco de sal y cocino durante 2 minutos.

Añado el pimiento rojo y cocinaré 5 minutos más. Incorporo una cucharada de harina todo uso y cocino durante 1 minuto. Añado 2 cucharadas de pimentón dulce y remuevo durante 12 segundos. Lo añado todo a las judías. Muevo la cazuela para que quede todo incorporado.